
Mi nombre es Humanidad y soy adicta a la red
Tener que obligarnos a desconectarnos de una pantalla no es progreso ni es evolución: es una distracción de nosotros mismos y una desviación de todo lo importante.
Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.