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Por María Alatriste

Corea está llena de significados. Antes de viajar allí, un colega que ama viajar me habló de la baby box que conoció por coincidencia en sus visitas a Seúl, algo que impactó profundamente sus valores.


La baby box es una caja monitoreada y acondicionada para que los progenitores que no pueden o quieren hacerse cargo de sus hijos recién nacidos puedan dejarlos allí a salvo. Esta iniciativa fue creada por el Reverendo Lee y está ubicada en la iglesia Jusarang Community Church.


El caso mediático del bebé de Tultitlán reafirma lo interesante que es esta iniciativa en Corea para salvar vidas. El contexto de esta idea surge cuando el Reverendo Lee tenía un hijo muy enfermo y pasó meses enteros en el hospital. Durante su estancia en la unidad de pediatría se dio cuenta de que había muchos casos de bebés abandonados en los botes de basura del exterior del hospital y en la entrada de este. Debido al frío extremo de Corea en épocas invernales y las condiciones en las que los progenitores dejaban a los bebés, muchos de estos perdían la vida.


El Reverendo notó que el hospital, al enfrentarse a esta inusual demanda, no tenía un espacio adecuado donde los bebés pudieran ser abandonados sin el riesgo de consecuencias fatales. Esto se debía a la falta de políticas y al estigma social que representaba ofrecer una solución para que madres o padres pudieran abandonar a sus hijos sin poner en peligro sus vidas.


Con esta preocupación el Reverendo Lee creó la baby box en 2015. Fue una idea que cimbró los valores coreanos e incluso los de todo el mundo. Muchos no podían creer que se pudiera implementar algo así. Les parecía una aprobación de un acto tan reprobable como el abandono de un bebé, sin importar que esto salvara vidas. Por eso, la iniciativa ha enfrentado muchos prejuicios, detractores y el rechazo de los valores culturales y sociales. No obstante ha sido exitosa, y desde su fundación ha salvado la vida de más de 1,500 bebés. Además, ofrece apoyo para que los progenitores reciban orientación y ayuda para repensar quedarse con su bebé.


Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.