Por Lucia Texis Castillo
Soy Lucia Texis Castillo, tlaxcalteca de hueso colorado y ambientalista. Defiendo el derecho que tenemos a decidir sobre el futuro de nuestros territorios.
Comencé a ser activista porque necesitaba hacer algo con la sensación de que nuestros territorios y vidas son sólo una moneda de cambio para políticos(as) y que tener una vida digna no importa para los planes de desarrollo que funcionan al sistema neoliberal.
Tlaxcala estuvo mucho tiempo detenido en el tiempo, hemos sido burla nacional por algunos síntomas tardíos de la modernidad pero esta situación, por lo menos a mí, ha nutrido una emoción de rechazo a la vida de las "grandes ciudades" con edificios que tapan cerros y montañas, con un ritmo de vida que apenas y te permite comer y una sobre población descontrola que apenas y te permite andar.
Por otro lado, aunque me gustaría que fuera diferente, luchamos contra los mismos monstruos que el resto del país. Por un lado, el cambio climático y la contaminación; y por otro, el oportunismo político y la crisis del estado de derecho.
Es un hecho que mientras menos involucradas estemos en la gestión pública, más pueden saquear, robar, vulnerar y generar ecocidios. Por eso, desde Yaocalli Centro de estudios y acción social a.c fortalecemos y acompañamos procesos que busquen crear estrategias colaborativas de democracia ambiental para defender sus territorios, sus derechos y los de la naturaleza.
Me uní a Constituyentes porque creo en la necesidad de compartir resistencias para mejorar estrategias que nos permitan entender mejor problemáticas y buscar alternativas que surjan desde lo local. Conociendo a más activistas del país reafirmo que nuestra labor es riesgosa, demandante y precaria a pesar de ser la primera línea en la defensoría de derechos.
Los retos que enfrentamos tienen que ver con la participación política limitada y la desigualdad porque va agrandando las brechas de quiénes tienen o no el poder de tomar decisiones en el país; de quiénes tienen o no, garantizados derechos.
Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.
Comments ()