Respira
Por Cristina Gutiérrez Salam
En la última semana más de un centenar de palestinos han sido asesinados mientras trataban de conseguir alimento para sus familias en los nuevos centros de distribución de la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF, por sus siglas en inglés). Desde el 27 de mayo la GHF, una organización privada apoyada por Israel y Estados Unidos y operando al margen de la ONU, ha iniciado una insuficiente y caótica distribución de ayuda humanitaria en algunos puntos de la Franja que ha derivado en decenas de muertes debido a los ataques que el ejército israelí ha llevado a cabo sobre la población hambrienta.
Desde el inicio de operaciones de esta organización la semana pasada, al menos 102 personas han sido asesinadas por disparos israelíes mientras intentaban acercarse a los centros de distribución. El domingo 1 de junio soldados israelíes abrieron fuego contra un grupo de personas que buscaba alimento cerca de uno de estos centros matando a 31. Dos días después, el martes 3, 27 personas fueron asesinadas y más de 100 resultaron heridas en circunstancias similares en la ciudad de Rafah, al sur del enclave palestino.
Ante estos hechos el gobierno israelí ha dado explicaciones confusas, en un principio negando los hechos y posteriormente reconociendo que sus tropas abrieron fuego contra las personas por haberse desviado de las rutas “autorizadas”. También ha declarado que los soldados decidieron disparar debido a que se sentían “amenazados” por la cercanía de la multitud.
SUSCRÍBETE PARA LEER LA COLUMNA COMPLETA...
